domingo, 26 de diciembre de 2010

Senza fine

El tiempo pasa deprisa cuando no existe;
no existe el tiempo cuando pasan a tu lado
un hombre bello y una soledad,
una sensación de perfumes
desconocidos.

Todos ellos habitan en el impensamiento,
como una estrecha calleja,
sin lados por los que avanzar ahora.

Lo importante es vencer a la nada,
adorar a lo que suena a poco,
sin escudarse en que te amo.

Hablo del tiempo, amigo, no del amor
que es cruel con gratitud,
con una palabra que se escucha apenas;

y no diré que vuelvas,
ni que te hayas perdido por los azules
anónimos de nuestros besos.

El tiempo dice adiós una vez,
no te deja pensar en los lados
del rostro más rollizo.

Llega y dice adiós,
sólo te amo y siento una dulzura
que no había pensado.

Arrivederci.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Nochebuena

No se puede abrazar a las palabras en Navidad.
Por tradición.

martes, 21 de diciembre de 2010

Microrrelatos

Nuestro IES Francisco de los Ríos participó el pasado 25 de Noviembre de 2010 en la Concentración para conmemorar el Día Internacional contra la Violencia de Género que tuvo lugar en Córdoba. Esta actividad está recogida en el Proyecto de Coeducación de nuestro IES.

Los alumnos y las alumnas de 2º de ESO A y B participaron en el IV Concurso de literatura Hiperbreve e Ilustrada, junto con otros 37 centros de la provincia. Uno de los relatos que nuestro centro presentó resultó ganador del 3er premio de microrrelatos, lo cual supone un orgullo para la autora y para tod@s nosotr@s. Su autora es Cristina Alcaide Baena (2º de ESO).

"Un día más se maquillaba intentando cubrir su magullado rostro.
La radio daba las noticias, un grave accidente ocurría cerca de su casa. Dejó volar su imaginación, al momento su rostro dibujó una pequeña sonrisa reflejada en el espejo que se rompió al escuchar el ladrido de Roki."

sábado, 18 de diciembre de 2010

Se trata-dicen- del alma

No he podido aún dar los veintiún gramos
de desidia,de desamor, de elocuencia...

Sí, aunque parezca imposible,
no he podido otorgar a Las Gorgonas
su beneplácito...

No quiero que disfruten de mis tuétanos
tan pronto;
tan pronto no quiero otorgar,
ni siquiera prestar.

Ahora todo se me hace intransitivo,
inorgánico, estúpidamente feo;
pero muy sensible, sí.

Y no desfallezco,
porque resultaría inútil a mis deseos.
No me alumbro porque soy tan pobre,
tan pobre de solemnidad inmensa.

Nunca he navegado en el mar

Nunca he navegado en el mar,
en grandes singladuras de carácter arriesgado;
en agua semidulce alguna vez sí lo he hecho.

Sientes, al principio, el error del pirata,
la inimaginable ruta del riesgo;
luego, en la sabiduría del marino,
se convierte todo en un viaje, en un desliz
de indolente.

Mas, las aguas ves bellas y tranquilas,
dan pie a la imaginación infantil;
a poca aventura, a frío y a soledad
que sería inimaginable en la tierra.

¡ Ingenuo marino de agua dulce!

¿ Quién me había preguntado...?

¿Quién me había preguntado esta mañana
sobre la vanidad, sobre la humedad del amor?

Ya, en el silencio de la sala, no recuerdo
el inicio de la jactancia,
de los enormes desatinos a las seis de la mañana.

Desgastándose en el corredor,
me miraba con desgana,
creyendo que ese amor era un sueño intocable,
que sólo eran quebrantos que sanaban el dolor.

Y la vanidad se fue resbalando por las comisuras
de los labios
como una suave y dulce crema de molde,
que , en su ímpetu, era una verdadera roca.

viernes, 10 de diciembre de 2010

El loco de la colina y la infancia

Justamente y ahora, me encuentro
sentado al borde de la colina
que tanto me hizo soñar
en los trigales de la campiña.

Ahora, junto a mi sillón de grandes orejas,
sueño otra vez con las nubes,
con los locos que, en mi infancia,
veía andar sin sentido,
olía a lo lejos...

También veía a chicas muy jóvenes
que miraban con ojos tristes a los chicos...

Y surgían las tormentas de verano de pronto,
y nos cobijábamos bajo el chozo
que destilaba deseos incomprendidos,
alguna pierna enjuta
y senos aparentes...

Allí permanecíamos callados, atentos
y deseosos de la nada;
nos convertíamos, por momentos,
en los grandes locos de la colina.

martes, 7 de diciembre de 2010

Puente de la inmaculada

( Dedicado a mi amigo Paco, que intentaba
viajar a las bellas costas de Cádiz)





Mis vacaciones, en este puente de diciembre,
es augurar sol,
sentir nostalgia de paisajes lejanos,
limitar a las nubes en su furia
y dejar correr a las aguas en su deseo.

El tiempo atormentado por las frustaciones
se muestra a la seis, generoso.
Indica aquello que debe augurar sin razones,
y se hace dócil con la vuelta al penoso trabajo.

¡El tiempo es siempre un límite!

La presencia es una osadía;
la de los jóvenes, la de los viudos,
la de la gente que intuye luces de colores
navideños.

En la puerta de los milagros,
esperaré a que esta lluvia odiosa se aleje;
a que sientas lo mismo que yo,
y que estas nubes tan negras que vislumbro en lo lejano,
sean dulces cúmulos que me hagan soñar.