lunes, 14 de noviembre de 2011

En dirección norte

Para no perder el ansiado norte

Compré una brújula en el viejo mercado de buhoneros,

Advirtiendo solemnemente que la idea de la perdición

Era fortuita, ineficaz y plausiblemente incierta,

Ajustada a la raigambre del origen de los pequeños destinos,

Los que se ignoran por falta de llegada

O, acaso, por conocidos pasos marcados en el barro del camino.

Con el tiempo, no hizo falta un empuje solidario ni una ayuda

Desinteresada en localizar el fin del presente más cercano.

Tiempo y pasos se asentaron a mitad de la ruta

Viendo la estrella polar destacar su luz en el crepúsculo

Y asomando el cuello para divisar fantasmas del camino

Que sentenciaron a tus pies el lugar exacto del infierno.

miércoles, 26 de octubre de 2011

OTOÑO

Con la engañosa mejoría de los moribundos,
la enfermedad de los relojes semejaba
altibajos vaivenes de la fiebre
que convertían a los hombres dormidos
en el páramo conyugal, en cansinas y frágiles figuras
que auguraban el amarillo cansado de la tarde.

La esperada y repentina brisa rastreaba
las primeras hojas herrumbrosas,
esparcidas en pedregal decimonónico;
unos ayes comenzaban a oírse en lo lejano
de las nubes que asoman ya su cuello.
Y los nimbos, signo bien cierto de la etapa,
se acercaban intuyendo nuestro aliento.

No desprecies este año, esta época
que antaño era romántica,
no detestes los viejos desaciertos
del colegio plumífero y odiado.

Es el tiempo del fin; no del invierno,
es la estancia secreta de las almas
lo que arroba a mi pecho ensangrentado,
del color algo lúgubre de esta tarde.

domingo, 4 de septiembre de 2011

AMOR BREVE

Por qué hemos de concebir o amar,
necesitar imágenes, rechazar iconos
o sutilmente ignorar a la noche
que se defiende con pocos rayos.

jueves, 21 de julio de 2011

Es al revés

Llevadme a Cuba a mi manera,
desoyendo la pobreza, el auxilio del barco;
más aún la claustrofobia del fuselaje
del pájaro del baluarte...

Llevadme a la Cuba mayor de lo que soy,
porque no entiendo el ritmo,
ni el engaño de las brillantes mulatas.

Llevadme a Cuba en el justo instante
en que las caracolas blanquecinas
suenen a corcheas cuadradas.

Llevadme a Cuba con el ron y el son
de no hacer nada,
y que no exista esa humedad que derrocha
luminosidad de las flores más jóvenes.

Así que, lllevadme a Cuba...

domingo, 17 de julio de 2011

El puñal de los cobardes

Nunca afirmes nada a tu espaldas,
ni siquiera si es cierto...

Un puñal amenaza a tu intención
de ser, otra vez, azul,
soberanamente azul-cielo
que es fiel reflejo de la incuria.

Veces dicen que es confusión,
y te vuelves tierno,dejado,
como una manta de los setenta en el suelo
de un concierto.

Y, miras ,por reflejo, a las piernas
de quien te amenaza con un punzón de goma,
ese que te hace sospechar,
del que augura un final infeliz...

¿Será el riesgo como para evitar al beso,
será la dulce memoria como para detenerse,
será el gesto tan inocuo como para invertir
otra vez en esa luna que se hace más pequeña?

¿O quizá será el puñal cobarde de Macbeth,
que sólo deja un ligero reguero de sangre azul?

jueves, 14 de julio de 2011

Cuba

Por primera vez habito esta plaza recóndita;
es fresca y jovial, malvive de gente;
es ideal como nueva visión, certera realidad.

Ya han pasado dos años,
me resultan monótonos los arcos ojivales
de la torre de enfrente
y el tipo que,con panamá, toma el café
solo.

A veces, en la hamaca,
sueño con dignas fotografías
que respondan al encierro civilizado
en el que ahora me encuentro.

Algún soplo de viento me recuerda
a mi verdadero hogar,
a lo más inocuo de los pasos anteriores.

Y comienzo a soñar con las doce del mediodía,
con los besos verdaderos del sol,
con el silencio de las olas que ,ahora, oigo.

Entonces mi alma comienza a despertar sin sentido,
mas con objetivo útil:
las naranjas de aquel patio, dulces,
las que compartía con mi madre en el silencio de la luz.

Sevilla y el carril bici ( segunda parte)

He encontrado con facilidad la solución:
la de saltar de farola en farola como simio primigenio;
ver las pequeñas alturas llenas de ciclos
y excrementos,
para evitar a las bicis, a los perros
y a los peatones.

Pero, me ha sido muy difícil.
Con ello no se impedía la miseria y los ojos perdidos
de los necesitados;
ni la música cierta de los callejeros,
ni la espléndidez del entorno.

Así que comprar una bici ha sido mi decisión,
para que la corroa el hollín del aire,
y, así, venderla a mejor precio.

Sevilla y el carril bici

Hoy, por hombre fuerte y tenaz,
me "han tocado el timbre" de los oídos en Sevilla.

La situación no era tan difícil:
consistía en tocar con barba el derecho
a acechar a los peatones
que sufríamos las cuatros ruedas
esperando que el tipo verde con buena figura icónica
nos diera licencia para evitar.

La tenacidad es obscena o cateta,
como circular a dos ruedas con dos cabezas.

Después de inquietar su singladura con radios,
el tipo se alejó echando improperios
que me hundieron en el sabor del desconocimiento
de mi inocencia.

Confirmaron mis peores presagios mis hijos,
que acompañándome en el paseo matutino
con lucidez me advirtieron de mi error:

No había sido otro que ocupar la luz del día,
que sentir la gran ciudad como un beso del cielo,
que corresponder a lo moderno de viajar en triciclo.

miércoles, 6 de julio de 2011

Otra vez sobre el oficio

Escribir poemas no es tan fácil
como adorar a un dios
o ignorar a un alma inútil
que acierta con el pellejo divino.

La prepotencia de la palabra no tiene
límites;
ni siquiera la vanidad del poeta más sublime.

Se escribe, porque se vive o se desvive
con situaciones amargas y bailes desacompasados,
o porque se odian las palabras que hieren.

Y hay veces que, callado, no dices nada
y los intérpretes hablan de desidia, de amor,
de dulzura, de sinsabor, de sin grito...

Ellos hablan de la inoperancia de la metáfora pura,
del aficionado a la tristeza,
del aficionado a la incuria,
del deseo de ser no deseado...

Ahora, en verano...

Ahora, en verano, mis hijos suben y bajan las escaleras
como verdaderos fantasmas adolescentes;
y a nadie hacen daño.

Son aparentemente indolentes y dulces
en los viejos escalones de granito rojo
que aún guarda la belleza de lo antiguo.
Pero no hacen daño...

El daño está mucho más lejos de la playas
del verano.

La herida es siempre el paso del tiempo
impasible,idiota:
el que nos hace creer en lo humano y en lo tierno,
en los dientes del lobo feroz
que ataca al viento sin hacerle daño.

Y la situación puede desmejorar,
y hacerse insostenible en la acera;
y seguir creyéndose la belleza subjetiva,
y dulcificar otra vez el alma
en la madurez.

Todo, examinado con reglas y compás,
es tan cierto como ¿qué?

Infatuo, arrojado por esta vela
que nos dirige al pairo,
las olas son más azules que nunca.

martes, 28 de junio de 2011

Sociobarco

Casi todos los esquifes embarrancaban,
mientras los grandes yates balanceaban en el azul.

No es cuestión de clase,
es de lo bien que balancean
los grandes esquifes.


Bellas mujeres hacían titilar sus copas
de champán.

Inútil a mi mismo me decía.
Y era verdad.

Pretendía crear un poema con este asunto,
y la tarde me hizo regresar a la casa.

Desde luego, es verdad la mentira que es verdad,
la impotencia del bello azul.

jueves, 23 de junio de 2011

Un viaje en tren

Cuando veo acercarse al tren que llevará a mis hijos
a lugares insospechados y normales,
comienzo a derramar lágrimas inútiles.

Soy un cateto con corazón, sin fuerza ya,
sin sensaciones...
No se puede percibir lo profundo.

Antiguamente traqueteaban
fuera de la estación,
iluminaban los serios faroles del andén
ruinosas vías sin sentido
que se escondían entre los trozos de hierba seca.

La luz mortecina del vagón-guía no era una ilusión en la noche,
era casi una muerte de nada,
una pequeña fantasía a oscuras
con un tipo serio en la cantina que ofrecía un trapo sucio
y mucho refresco de alma.

Decía: "Refresco el mar, refresco la noche,
saludo a la soledad de la valija,
y aprieto los dientes cuando ebrio
descubro al que se marcha..."

Ahora, todo pasa tan deprisa como una brizna,
no hay luces, todo son formas redondas en los viajeros
y maletas que se sitúan unas junto a otras,
apenas hay la intimidad de antes.

Y cojos, o fuertemente sujetos a unas alas,
sonreímos entre los cristales binoculares
que reflejan un paisaje que no es de fantasía, es real.

No hay paisajes oscuros en este viaje: era una mentira.
Pero sí mucho molino y un cierto brebaje pagado
por los viajeros que miran al frente de sus caras
y escogen unos pequeños hilos que no son de seda,
mas magnifican el sonido que dentro es ausente.

Últimamente, sueño con trenes recios
que me hacen adivinar
unas grandes alas que desprecian al suelo,
al cielo...

Otra cura críptica de humildad

Nada es nada si no se combina con viejas historias ,
si se entorpece el caminar por deseos incorruptibles
o se intenta explicar el desarrollo de lo intrincado
por simple.

A veces, la métrica-tremendo oponente de la misma-
me ha enseñado el ritmo, la cesura, la mesura impía
que destrona a corazones amenazados por lo sutil
y aleja a las vocales del diptongo inútil en el sonido.

Desprecio a las imágenes y a los sentimientos de mi copa;
admiro el sabor, el olor de lo que desprenden sin solicitud
las torvos deseos de lo que es inescrutable ,
de lo que asoma apenas.

martes, 21 de junio de 2011

El capitalismo

La estela de la mar mataba en el horizonte
a un tipo de ojos cerrados que era un chino
fatuo que vendía metacrilato por acero.

Todo lo guardaba en el cajón, en el hueco
de las cuestiones inútiles, de los nuevos relojes
de colores en los que piaban pájaros estentóreos.

viernes, 27 de mayo de 2011

Recibo los golpes

Sentí el impacto como los grandes hombres solos,
fingí al igual que las gaviotas cierta vanidad,
insistí sobre lo imposible de dejar una esquina.

Aquella vez quedé noqueado,
noqueado sin aliento;
ahora el amor apasionado
es un hombre con sangre en la boca...

miércoles, 25 de mayo de 2011

La ciudad

...He visto tantas caras distintas,
tantas imaginaciones y deseos
que los viejos árboles de Los patos
han sido enemigos hoy.

No, no soy un hombre de ciudad otra vez.
No soy un hombre civilizado.

Y me da pena por los otros
que arriesgan inutilidades del pasado
que cargaron sus maletas sin morir por nadie.

Yo no quiero a socios ajenos al champú,
a inimaginables palomas que no son nada.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Tú.

Tú, que hablas con el alma y amas con la mirada.
Tú, que persigues la felicidad de la mano del amor.
Tú, que fuiste, eres y serás.
Tú, mi razón de ser.

jueves, 28 de abril de 2011

Este pesimismo que me es grato

Entre la imagen ingenua de unos cuantos amigos
que ignoraron a tiempo el color de las cosas,
hemos dicho muy pronto que el fragor era inútil;
que los dulces deseos eran frágiles
huesos de sabor imposible;
que la fresca fragancia
de los setos en flor, simples velos cubiertos
de recodos imberbes.

Ahora son los más jóvenes, con su cierta ignorancia,
los que son defendibles o quizá no muy bravos.

El espejo muy oscuro no da para designios,
ni aún de súplicas vanas que ya esperan su turno
en el ámbito serio de lo ya queda oculto.

Es difícil abrirse a estos tiempos que dejan
resonar a los gestos tanto tiempo tan nimios,
a los falsos deseos que ya anuncian fracaso
de lo más refutable en un hueco juicioso.

Siempre, el escape de esa cara corriente
suele ser un propósito de incontables canciones,
de difíciles juegos que terminan en tablas,
y agradecen muy mucho un ligero armisticio
de las almas que luchan sin saber su destino.

viernes, 15 de abril de 2011

Album Blanco

He acordado con la gente la ignorancia
de lo más extenso;
me han respondido con altanería,
y me he rodeado de espaldas sin sentir.

El amor. Me han dicho.
Lo mío silencio en la soledad.
Un único hueco serio.

He acordado con la gente que no grite
y me han dado placer: silencio.

Será que, al final, es así,
o lo mismo de antes.

La duda es irreverente para el osado
o un desconocimiento de lo que no existe.

No seas así. Es el album blanco
de la desidia, de lo desechable.
Es el album de Julia.

martes, 15 de marzo de 2011

El furor del tiempo

Me habría hecho falta, una vez más, otra vida,
porque el sol irrumpe brutalmente por el este
y no hay jornada que no se haga fugaz, huidiza,
desordenadamente efímera en las pocas horas
que, expeditivamente, resbalan en el día.

Crees que el rayo no muere en el oeste,
y esbozas una sonrisa infantil que argumente
el engaño más incuestionable y axiomático:
La supuesta dulzura de lo zanjado y más metódico.

¡No todo es consumación y término! exclamas frugalmente,
para hacer una pirueta a lo irrevocable,
a lo fastidiosamente inoportuno, improcedente.

Calmas tu cólera y tu fiereza y te vuelves sumiso y manejable :
Es el obligado reposo del guerrero que sólo obtendría una victoria
irreparablemente pírrica, en este asunto desastrosamente serio.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Demasiado tarde.

Casi sin darme cuenta se ha alejado, poco a poco, sin pausa pero sin prisa. Al ritmo del latir de mi corazón.
He reaccionado demasiado tarde. Ahora ya es imposible recuperarlo, volver atrás, al pasado. Allí donde una sonrisa bastaba para saber que nos queríamos.
Recuerdo cada tarde junto a él. Anhelo despertar abrazados al alba, cuando éramos una sola persona.
Ahora todo ha cambiado. Sus manos ya no acarician mi cara, ni sus labios rozan los míos. Ya no me pertenece, y cada parte de mí lo busca en mis recuerdos. Pero sólo queda un leve suspiro, que me quema el alma.

martes, 22 de febrero de 2011

La perspectiva

Tener una sola perspectiva de la calle
siempre es un fracaso;
así como intentar desdoblar las cuadernas más viejas
de la historia,
las que cambiaron -a base de singladuras-
la misma misión que la del barco.

Y es por ello que ya surge reflexión
de los hechos más humildes,
de la indescifrable amargura de lo exacto.

Sorprende, muchas veces,una dulce y fatal
idea,
el incomprensible desatino de los besos.

Sin embargo,lo más nimio me impresiona,
retrocedo en los casos más flagrantes,
sólo invento lo que ya está deseado,
y auguro dulcemente un legajo
no más cierto
que los pasos más seguros de la historia.

martes, 8 de febrero de 2011

A Emilio

Un tipo que pierde el pelo poco a poco
me llama desde Las Barbados y me dice:
"es increíble este mar tan extenso,
y mucho más cuando se hace turquesa
y atraviesa nuestros tuétanos indiferente".

Y continúa navegando a Trinidad y Tobago,
y permanece mudo.

Debe ser como la sequedad de la boca
el trasiego de los mares,
una ingenuidad soñar con describir
el sueño de tamaña singladura.

Mas eso no me impide viajar con engaño
a costas más cercanas,
y, patrón de barco, fumar en pipa;.
dejar que el humo atraviese la popa
cual inútil saeta sin herida.

Y ,ya siendo capitán de barco,
derramar el deseo de llorar
en la playa más cercana.
Eso sí...
con la posibilidad de avisar
a los barcos que se acercan a la amenazadora escollera.

jueves, 27 de enero de 2011

Ahora...

Ahora que me adjudican imágenes negras,
que me dejan solo en mi defensa,
a ver si logro despejarme
del sol, de las falsas imágenes.

Los sonidos de la guitarra
me suenan a antiguos alientos del sol,
noctámbulos andando en la noche.

Ya sé que nos perseguían antiguos espectros,
y nunca dijimos nada desacompasado;
inclinamos nuestras cabezas viendo al sol
que desaparecía poéticante entre tus piernas.

Y no dijimos nada.
Todo era el mundo de los paparazzi:
era de cartón-piedra.

miércoles, 26 de enero de 2011

Ambición.

Sí, esa es la palabra. Hay que ser ambicioso,
querer llegar lejos, porque querer es poder.
Tampoco hay que pasarse, ya se dice que en el
centro está la virtud. Ni mucho, ni poco, pero a veces
te quedas en el intento. Casi pero no del todo.
Te llevas una gran decepción y decaes,
ese es el fallo. De los errores se aprende y nunca es
tarde cuando se trata de aprender.
Y a veces, cuando crees que todo es perfecto ¡zás!
Algo cambia las tornas, y vuelves a caer. Es como una
cadena que siempre se repite volviendo a empezar
una y otra vez, de arriba a abajo, de izquierda a derecha.
Pero no aprendes, vuelves a caer en la tentación. Pero,
¿sabéis cual es la mejor forma de librarse de la
tentación? Caer en ella.

martes, 11 de enero de 2011

El enseñante

Hoy he vuelto a insistir en las horas amargas
de los hombres que ocupan el espacio más nimio,
de la gente insidiosa que refleja su alma,
y desea,vehemente,una cierta ignorancia,
ignorada por todos, recubierta de magia.

El asunto era, entonces, una vieja fragancia
de sutiles historias, todas llenas de engaño,
bien cubiertas de fases, de naranjas y leños;

Lo continuo existía por su propia ignominia,
su deseo irrefrenable era pura jactancia,
ejercicios sufrían un ligero desprecio;
resultados imposibles,insufribles desprecios.

Algoritmos inútiles eran puro reflejo
de difíciles cuentas, de incógnitos besos;
de esos versos inútiles que ya encumbran al sexo.

Y fue entonces cuando hicimos
del amor un gran verso,
del desierto una nube, bien rellena de besos.

Y acabóse la insignia que teníamos en el pecho,
nos dijeron, por tanto, que era fatuo el intento
de llevar a tu vida un pequeño deseo.

Rectificantes muy cultos, despreciaron el gesto,
y una nube encarnada, destrozó nuestros huesos.