martes, 22 de febrero de 2011

La perspectiva

Tener una sola perspectiva de la calle
siempre es un fracaso;
así como intentar desdoblar las cuadernas más viejas
de la historia,
las que cambiaron -a base de singladuras-
la misma misión que la del barco.

Y es por ello que ya surge reflexión
de los hechos más humildes,
de la indescifrable amargura de lo exacto.

Sorprende, muchas veces,una dulce y fatal
idea,
el incomprensible desatino de los besos.

Sin embargo,lo más nimio me impresiona,
retrocedo en los casos más flagrantes,
sólo invento lo que ya está deseado,
y auguro dulcemente un legajo
no más cierto
que los pasos más seguros de la historia.

No hay comentarios: