Este es uno de los poemas que tenía olvidado. Es curioso que cuando lo volví a leer, no recordaba por qué lo escribí, -a veces pasa-. Me resulta aún extraño porque no suelo escribir poemas aislados, pero revisando textos antiguos -no mucho, la verdad- volvió a mis manos. Supongo que tendrá alguna intención, de momento queda aquí para que no lo vuelva a perder.
Usted podría mirar adentro,
rescatar un solo tramo de mi infancia,
rodearlo de una coraza de expresiones,
seducir su rostro,
aparentar que no es un juguete roto,
en dos segundos pronunciar en él
cualquier palabra que me alegre el sueño
y responder por ella toda la eternidad.
Una vez inmerso en este naufragio,
usted podría alumbrar la galería,
hacerla un lugar hospitalario,
acomodarla en el crepitar de la nostalgia.
"...un niño cruza corriendo
tras una pelota de agua
que se derrama en el trayecto,
mira al suelo; éste le devuelve
la imagen de un desconocido...”
He saltado de un texto a otro
sin darme cuenta.
No sé cómo descifrar esto.
Usted podría mirar adentro
y regalarme una sonrisa de largo alcance,
creo que tiene mucho talento
para fingir que no ve nada.
Día de a Biblioteca 2019
-
La Dirección General del Libro y Fomento de la Lectura, a través de la
Subdirección General de Coordinación Bibliotecaria, impulsa la celebración
del *Día...
No hay comentarios:
Publicar un comentario